El equilibrado hidráulico en instalaciones de calefacción
Es muy importante tener en cuenta al momento de instalar un
sistema de calefacción por caldera más radiador que se realice un buen
equilibrio en lo que respecta a lo hidráulico, ya que, si se hace una perfecta instalación hidráulica
esto permitirá que el mecanismo realice satisfactoriamente su funcionamiento.
El principal beneficio de realizar un equilibrado hidráulico
es asegurarse de que todos los radiadores reciben el agua que necesitan y que
las válvulas termostáticas funcionarán de forma óptima.
A continuación mostraremos que ventajas o desventajas tiene
el montar un sistema de calefacción con equilibrio hidráulico o sin él.
Ventajas de tener un buen equilibrio hidráulico en los sistemas de calefacción
La mayoría de los sistemas de calefacción existentes funcionan
con agua, esta circula por todo el circuito
hasta llegar a los radiadores y de esta forma proporcionan el calor necesario dentro de la vivienda.
Es aquí donde radica la importancia de hacer un buen
equilibrio hidráulico, porque este permitirá que todo el sistema funcione
adecuadamente.
Entre sus grandes ventajas se pueden mencionar:
- Se obtiene una óptima distribución de agua en todo el mecanismo
- Permiten ahorrar en cuanto a energía se refiere
- Proporcionan un mejor manejo de los sistemas
- Se tiene un mejor control de todo el sistema de calefacción, lo que proporciona la temperatura idónea dentro de la habitación o vivienda.
- No genera ruidos en las válvulas.
Los sistemas equilibrados hidráulicamente permiten un
servicio energéticamente eficiente y un buen confort para la instalación de
calefacción y refrigeración.
Consecuencias que trae hacer una calefacción con un inadecuado equilibrio hidráulico
- Falta de caudal de agua en radiadores y baja emisión calorífica, esto quiere decir que el agua no llega suficiente hasta los radiadores, ocasionando insuficiencia de calor en las viviendas o habitaciones.
- Ruido en radiadores por exceso de caudal. El exceso del agua también es otro factor determinante en el mal equilibrio hidráulico del sistema de calefacción ya que, proporciona excesos de ruidos lo que resulta bastante incómodo para la familia y su entorno.
- Mayor consumo de energía, lo que registraría aumento en la facturación y más gastos.